Las lesiones para trabajar ante el ordenador son cada vez más frecuentes y más extendidas entre la población. A Mans de Sant, el centro de fisioterapia de referencia en Sant Cugat del Vallès, nos gusta que nuestros pacientes tengan toda la información posible para evitar el mal a la musculatura cervical. Por eso, proponemos una serie de consejos y ejercicios.
Si trabajáis con el ordenador, colocáis la pantalla de forma que la parte de arriba os quede a la altura de la vista o ligeramente más abajo y ponéis los antebrazos muy apoyados.
Adoptáis buenas posiciones en la hora de sentaros, apoyados encima de los isquiones (los huesos que tenemos debajo de las nalgas), sin que se redondee la parte inferior de la columna (respetando las curvaturas naturales de la columna).
Si tenéis que manejar pes, procuráis trabajar con los brazos como máximo a la altura de los hombros, así evitaréis sobrecargaros demasiado.
Si trabajáis en trabajos en que fijáis la mirada, recordáis que a la vez también tensáis la musculatura cervical, por eso hay que hacer pequeños descansos y, a ratos ejercicios.
A causa a la relación existente entre el ojo y la musculatura cervical, hay que realizar ejercicios que explicaremos a continuación. Se basan a disociar el ojo respecto del segmento cervical, y el segmento cervical respecto del resto del cuerpo. Cuando los practicar basura un trabajo òculo-vestíbulo-motor, se interrelacionan la vista, el equilibrio (oído) y el aparato locomotor. Se trata de movimientos armónicos que sirven para aligerar tensiones cervicales.
1. Miráis un punto fijo y, sin perderlo de vista, giráis el hacia un lado y al otro.
2. Dejáis el jefe inmóvil y movéis los ojos hacia un lado y otra.
3. Repetís los dos ejercicios anteriores, pero con los ojos cerrados.
4. Derechos, mirando adelante, dejáis el jefe inmóvil y feudo girar el tronco hacia un lado y hacia el otro.
5. Reseguís con la mirada y con el jefe un 8 horizontal imaginario.
6. Cuando nos encontramos ante el ordenador, si dividimos la zona cervical de nuestra columna en dos partes, la parte inferior se encuentra en flexión y la parte superior, en extensión. El ejercicio consiste a hacer como si nos estiraran con un hilo, buscando justamente una extensión de la parte inferior y una flexión de la parte superior, como si entráramos la barbilla.
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